Como abrir una ostra

Para los apasionados del marisco las ostras son, sin duda, uno de los mejores manjares que nos proporciona el mar.  Pero, al mismo tiempo, también es uno de los más ‘problemáticos’ a la hora de servir en la mesa. ¿La razón? La eterna pelea por abrirlas correctamente.  Y es que, cuanto más frescas sean más se ‘resisten’.  Estos son algunos consejos para no llevarse un dedo en el intento.

 

Como conservar las ostras

Lo primero y más importante, es la relación temperatura/humedad. Las ostras deben almacenarse entre 4º y 8º, la temperatura de nuestras neveras, pero deben ir hidratadas de un lecho de hielo pilé para conservar la humedad que necesitan, ya que el frio seco de la nevera las deshidrataría tanto que
podrían morirse.

Recordemos que la ostra está viva, por lo que no la debemos congelar nunca.

El segundo aspecto es la posición en la que están colocadas. Debemos almacenar las ostras en casa siempre con la concha cóncava hacia abajo, así ellas mismas pueden retener el agua en su interior y llegar en condiciones optimas a nuestra mesa con todo el sabor y textura.

El mejor contenedor es la caja original con la que nosotros mismos o las mandamos a casa. Hemos diseñado esta caja de madera de chopo y viruta de castaño que retienen grandes volúmenes de humedad y drena el líquido excedente si es necesario.
Y lo completamos con papel termo-inteligente que conserva la temperatura adecuada.

La manera de optimizar la conservación de las ostras Amélie, en el caso de que abramos la caja, debemos cerrarla de nuevo con una goma elástica y su tapa, a ponerle un peso en la parte superior que haga presión.

Siguiendo estos sencillos consejos podremos conservar las ostras hasta 10 días en casa. Por lo que podemos planificar la compra con antelación y asegurarnos que serviremos a nuestros invitados las mejores ostras en las mejores condiciones.